Vuelven las negociaciones salariales en Provincia: los gremios reclaman por la inflación

El Gobierno de la Provincia de Buenos Aires retoma este lunes el diálogo paritario con estatales y docentes. Los sindicatos exigen recomposición salarial ante la caída del poder adquisitivo y el impacto del ajuste nacional.

Este lunes, el gobierno de Axel Kicillof abre una jornada clave para el futuro de los salarios públicos en la provincia de Buenos Aires.

En medio de un contexto marcado por el ajuste económico, la recesión y la pérdida del poder adquisitivo, se reanudan las paritarias con estatales y docentes, quienes vienen reclamando con fuerza una recomposición salarial urgente.

La convocatoria, formalizada el viernes pasado por el Ministerio de Trabajo, llega luego de múltiples pedidos de los gremios que agrupan a los trabajadores bajo la Ley 10.430, como ATE y Fegeppba, quienes denuncian que los incrementos acordados a comienzos de año quedaron muy por debajo del ritmo inflacionario.

Según el cronograma oficial, los representantes docentes serán recibidos a las 10:30 y los estatales a las 12:00. En ambas reuniones se espera la presencia del ministro de Economía, Pablo López, quien ya había encabezado las rondas anteriores.

El último acuerdo paritario, firmado en febrero, contemplaba un aumento del 9% escalonado entre febrero y marzo, sobre la base de los sueldos de enero. Sin embargo, con la inflación acumulada y la falta de actualizaciones posteriores, los gremios consideran que ese ajuste fue insuficiente para sostener el poder de compra de los salarios.

Además del tema salarial, también se reactivarán las mesas sectoriales, en las que se abordan reclamos puntuales de distintas áreas del Estado. Desde los sindicatos aseguraron que acompañarán cualquier medida del Ejecutivo bonaerense destinada a mejorar la recaudación y la calidad del gasto, pero remarcaron que la prioridad hoy es garantizar condiciones dignas para los trabajadores.

Las miradas están puestas en esta nueva ronda de negociaciones, que se desarrolla en un escenario de tensión por el recorte de fondos nacionales y la caída de la actividad económica. Para los gremios, esta instancia será determinante para definir los próximos pasos en un año que todavía no encuentra equilibrio en materia salarial.